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¿Qué prefieres, la Luz o la Oscuridad?

 

Leyendo la Biblia en el Evangelio de Juan capítulo 3, me encontré con la siguiente enseñanza: »No hay condenación para todo el que cree en él, pero todo el que no cree en él ya ha sido condenado por no haber creído en el único Hijo de Dios.

Esta condenación se basa en el siguiente hecho: la luz de Dios llegó al mundo, pero la gente amó más la oscuridad que la luz, porque sus acciones eran malvadas.

Todos los que hacen el mal odian la luz y se niegan a acercarse a ella porque temen que sus pecados queden al descubierto, pero los que hacen lo correcto se acercan a la luz, para que otros puedan ver que están haciendo lo que Dios quiere”.

De acuerdo a lo que nos enseña la Biblia en esta porción del Evangelio de Juan, aquí se nos da a entender que hay personas que aman más la oscuridad, porque hacen cosas malas. Las “malas obras” se presentan como acciones que van en contra de la voluntad de Dios y de lo que nos enseña la Biblia en cuanto a nuestra conducta y comportamiento. Estas acciones atentan contra el bienestar de las personas que nos rodean y se caracterizan por ser egoístas, destructivas, violentas, deshonestas o basadas en la codicia y la envidia.

Al leer o escuchar las noticias de nuestro país, nos damos cuenta que la mayoría de estas malas acciones o actitudes, ocurren en la oscuridad o en la noche. Esto me lleva a reflexionar en lo que dice la Biblia… “Todos los que hacen el mal odian la luz y se niegan a acercarse a ella porque temen que sus pecados queden al descubierto…”

También he investigado lo que dicen los psicólogos o psicólogas, sobre las personas que desarrollan actividades en la noche. Señalan que esas personas sufren de “Nictofilia”, ya que afirman experimentar fuertes sentimientos de bienestar durante la noche.

La Nictofilia es la preferencia anormal por la noche. También se describe como amor a la oscuridad o pasión por ella. Esto ocurre cuando una persona se siente más cómoda en la oscuridad que durante el día. Se trata de un término coloquial no incluido en los manuales de diagnósticos psicológicos.

La definición de Nictofilia, es de acuerdo al diccionario de psicología de la Asociación Americana de Psiquiatría, y esta no incluye connotaciones patológicas. Teniendo en cuenta que no hay hasta la fecha ningún sistema o diagnóstico que lo considere como tal y, junto con la falta de literatura científica relacionada, la primera conclusión que podemos extraer de la nictofilia es que no se trata de un problema psicológico. Entonces es, como dice la Biblia “…pero la gente amó más la oscuridad que la luz, porque sus acciones eran malvadas”.

La Biblia es enfática con respecto a este tipo de personas, ya que nos dice que: “Todos los que hacen el mal odian la luz y se niegan a acercarse a ella porque temen que sus pecados queden al descubierto, pero los que hacen lo correcto se acercan a la luz, para que otros puedan ver que están haciendo lo que Dios quiere”.

En el Antiguo Testamento el libro de Isaías capítulo 5 dice: “¡Qué aflicción para los que dicen que lo malo es bueno y lo bueno es malo, que la oscuridad es luz y la luz es oscuridad, que lo amargo es dulce y lo dulce es amargo! ¡Qué aflicción para los que se creen sabios en su propia opinión y se consideran muy inteligentes!”

Según la enseñanza de la Biblia, la oscuridad se utiliza como un término espiritual o en una figura retórica para significar ignorancia, error o maldad en general. Y la luz simboliza el conocimiento o entendimiento, la verdad y la justicia.

Para ir concluyendo podemos decir que, según lo que enseña la Biblia, en este mundo malvado hay dos caminos ante todos los seres humanos: El Camino de la Luz y el Camino de las Tinieblas. El primero pertenece a Dios y se identifica con la verdad y la justicia. El segundo es de nuestro adversario, Satanás el diablo. Siendo sus marcas, la falsedad y la maldad.

 

¿Qué camino elegiremos para vivir nuestro día a día?

 

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By Diario Cóndores del Baker

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